Ante la tragedia ocurrida la tarde del martes y en vista de las miles de penurias que padecen desde hace tiempo, algunos de los habitantes de la Isla de la Culebra, entre ellos la familia Henríquez Muñoz, desearían abandonar el sector pero no pueden o no quieren hacerlo pues son muchos años de estar habitando en la zona y además que no cuentan con los suficientes recursos para construir en otro lugar.
Así se expresaron algunas de las personas, que la tarde y parte de la noche del martes, fueron testigos de la tragedia de la familia Henríquez, al perder a seis de sus integrantes, entre niños y adultos.
Aún cuando están consternados por lo ocurrido, los vecinos dijeron que desde hace bastante tiempo, han hecho sus peticiones para que alguno de los gobiernos solucione sus problemas, empezando por la entrada a la zona, como es el conocido terraplén, cuya obra tiene paralizada más de seis meses y el lago amenaza por destruirlo por completo, pues de 12 metros ya se redujo a seis.
Alegaron que la idea es que quien se haga cargo del trabajo, amplíe el terraplén y coloque los muros de contención para evitar una tragedia como la del martes, que enlutó a la familia Henríquez.
De acuerdo con los testimonios de conocidos y familiares de las víctimas, entre ellos Félix Morgado, mototaxista, quien dijo ser uno de los testigos de la tragedia, narró que la tarde del martes, iba en su moto, cuando por el terraplén se desplazaban dos vehículos, entre ellos el Ford Granada. Le hice cambio de luces para que redujeran la velocidad y no levantaran tanto polvo.
Sin embargo, cuando el Granada trató de adelantar, el conductor perdió el control y se fue al fondo del lago.
En ese sentido comentó que hacen falta las defensas en el terraplén, además de patrullaje policial, pues a diario son objetos de robo en el tramo carretero.
Mientras que en medio de su dolor, el padre del niño de dos años y del conductor del vehículo siniestrado, esposo de una de las damas, Lesli Henríquez, dijo tener más de 30 años de residir en la isla y lo ocurrido fue prácticamente un asesinato.
Agregó que siempre ha habido incidentes en la zona, pero nunca muertes como la de la noche del martes, donde seis integrantes de su familia perdieron la vida.
El tío paterno de los niños, Pedro Manuel Henríquez, pidió que la junta comunal solucione este problema, porque se lava las manos y no ha hecho nada.
Dijo que los vecinos alegan lo mismo, pues están en desacuerdo con la situación que ocurre en la isla, pareciera que este sector no existiera en el mapa de Venezuela.
Reveló que la carretera, es decir donde se ubica el terraplén, medía 12 metros de ancho, pero se redujo a seis metros y la junta comunal no hace nada con respecto a esta situación.
Citó que murieron seis de sus familiares, quienes eran sus sobrinos, la abuela de sus sobrinos y su cuñada.
Comentó que también bajaron los recursos y la maquinaria está paralizada.
Dentro de poco llega la temporada de lluvia y la preocupación crece cada vez más por las condiciones del tramo carretero.
Una vecina de nombre, Lilibeth Palacios con más de 20 años de habitar en la zona, narró que fue mucho después que entre los vecinos lograron rescatar el carro de la familia Henríquez.
Ahora nos da pavor, sobre todo yo que tengo una familia grande, comentó en medio de la consternación.
Mencionó que no cuentan con transporte público, solo algunas veces, lo que tienen es servicio de mototaxi, que cobran de lunes a viernes una tarifa de 5 bolívares y 10 los fines de semana. También hay un servicio de carros conocidos como "rapiditos".
Alegó que la zona donde está el muro que forma parte de la carretera, está completamente a oscuras, pero argumentó que antes era peor, pues el barro les llegaba casi a las rodillas.
Señaló que posiblemente en los próximos días pudieran planificar una protesta para presionar a las autoridades para que arreglen el terraplén, que le pongan barandas o muros de contención.
Edgar Eduardo Tovar, mototaxista, dijo que hace cierto tiempo empezaron a laborar en este transporte, pero también sienten temor por la oscuridad reinante en la vía, pero tienen necesidad de trabajar.
La tragedia dejó consternados a todos, porque son una gran familia que todos viven en la isla.
Comentó que allí han pasado muchas cosas, al tiempo que solicitó que el gobierno pudiera construir un puente y ofrecerles mayor seguridad.
Otro familiar de las víctimas, Alexander Muñoz, mencionó que eran nueve hermanos, al tiempo que le pidió al Gobierno que los tome en cuenta, porque lo que le pasó a sus parientes, le puede pasar a cualquier otra persona.
Comentó que donde están el terraplén hay más de cuatro metros de profundidad.
Obra inconclusa
La directora municipal de Protección Civil en Los Guayos, Milagros Flores, mencionó que estos incidentes pueden ser por imprudencia del usuario, pero acotó que hay que consolidar más el proyecto que están llevando a cabo en la zona, como es la obra inconclusa por parte del Ministerio del Ambiente, y que se estimó a una cota de 415 del lago.
Le faltan los rompeolas y lo que ha producido que la obra se socave por efectos del agua.
Estimó que deben reconsiderar el proyecto y no es necesario que haya más víctimas para tomar acciones y entre ellas las defensas.
Acotó que para el terraplén estaba contemplado la construcción de unos vasos comunicantes, tuberías, defensas, asfaltado, pero esto no se ha realizado.
Hizo un llamado a las personas que se desplazan por el terraplén, tanto conductores de motos como vehículos, para que no lo hagan a alta velocidad
Desde la noche del martes, el alcalde del municipio solicitó una entrevista con el Ministerio del Ambiente, para reconsiderar el proyecto, dijo.
Con relación al alumbrado, recordó que con la crecida del lago, los postes quedaron prácticamente sepultados dentro del agua.
Cabe recordar que la situación del terraplén, fue denunciado hace tiempo por los medios de comunicación social, tanto de Aragua como Carabobo.
Tragedia en Los Guayos
Pasadas las seis de la tarde del martes, 23 de abril, en la vía principal hacia la Isla de la Culebra en el municipio Los Guayos, integrantes de una misma familia, murieron ahogados, luego que el vehículo en el que viajaban, un Ford Granada color azul, placa AUH-254, patrimonio familiar, se desplomara al fondo del lago, justo en el paso del terraplén.
Las víctimas fueron identificadas como Yorleidi Muñoz, de dos años; Anabel Leal, de 3 años; Elio Henríquez, de 10 años; Darwin Henríquez, de 22 años, conductor; Anabel Muñoz, de 40 años; Ezequiela Muñoz, de 62 años.
Los cadáveres fueron trasladados a casa de la familia en la Isla de la Culebra y serían sepultados en el cementerio el Oasis en el municipio Libertador.
MÉLIDA ESCALA | el siglo-Valencia
foto | ALEXANDER TORRES
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